miércoles, 6 de junio de 2007

de paseo por las librerías / mesa de novedades [ 5 ]

Entre las librerías independientes de Barcelona, Laie es tal vez una de las más importantes y tradicionales. Tras oír hablar muchas veces de ella, un día pasé por la sucursal de la calle Pau Claris —las otras están en el Centre de Cultura Contemporània de Barcelona (CCCB), en el Parc Güell, en La Pedrera, en CaixaForum y en CosmoCaixa— pero apenas tuve tiempo para asomarme a curiosear qué había en la vitrina porque iba tarde para una cita. Luego, hace un par de semanas, Patricia Escalona —la directora editorial de Roca— me puso allí una cita para hacer la entrevista que publicaré mañana. Ese día le dije a Patricia que era la primera vez que entraba a Laie y caí en cuenta de que siempre creí que ésta estaba muy lejos de mi casa, por lo cual me había acostumbrado a ir a La Central del Raval o a Documenta.


A continuación presento un resumen de los libros que encontré en la mesa de novedades de la sede de Pau Claris de la librería Laie en mi visita de ayer en la tarde:


Librería: Laie (Pau Claris, 85)

Fecha: martes 5 de junio de 2007 (6.41 p.m.)

Algunos libros de la mesa de novedades:



- Los vagabundos de la cosecha, de John Steinbeck


- Finalmusik, de Justo Navarro


- Hoy, Júpiter, de Luis Landero


- El secreto del mal, de Roberto Bolaño


- Al oeste de Roma, John Fante


- Ronda nocturna, de Sarah Waters


- Sin respiro, William Boyd


- Los amigos de los amigos y otros relatos, de Henry James


- Crónica de Dalkey, de Flann O’Brien


- Los ejércitos, de Evelio Rosero


- La suerte de Jim, de Kingsley Amis


- Las praderas del cielo, de John Steinbeck


- El castillo blanco, de Orhan Pamuk


- Diarios, de León Bloy


- Los 70 a destAjo, de José Ribas


- Vida de Samuel Johnson, de James Boswell


- Ayer no te vi en Babilonia, de António Lobo Antunes


- Polonia y Rusia, de Joseph Conrad


- Faros, de Walter Scott


- Cambio de rumba, de Klaus Mann


- Prosas apátridas, de Julio Ramón Ribeyro


- El perdedor radical. Ensayo sobre los hombres del terror, de Hans Magnus Enzensberger


- La biblioteca de noche, de Alberto Manguel


- Miedo líquido, de Zygmunt Barman


- Guia de la Fira de Frankfurt per a catalans no del tot informats, de Sergio Vila-Sanjuán


- Cinco meditaciones sobre la belleza, de François Cheng


- Homenatge a Catalunya, de George Orwell


- Dos novelas bastante cortas, de Julio Camba


- Los mejores jóvenes novelistas estadounidenses, editado por Granta


- Cuentos, de Ernest Hemingway


- El mundo de los prodigios, de Robertson Davies


- En el lejero, de Evelio Rosero


En la mesa de novedades de la sede de la calle Pau Claris de Laie salta a la vista que su orientación es hacia libros con un nivel de exigencia alto y cuya calidad es sobresaliente, lo cual se confirma al recorrer las estanterías del interior de la librería. En este sentido Laie, al igual que otras librerías que ya he mencionado anteriormente, va en contravía de las tendencias generales del mercado que buscan homogeneizar por lo bajo. Seguramente una de las razones por las que Laie se mantiene está asociada al hecho de que lleva años cultivando una clientela a la que le ofrece aquello que además de satisfacer sus necesidades y expectativas, le suscita nuevas inquietudes.

4 comentarios:

sfer dijo...

A mí, que por Sant Jordi me gusta comprar libros "especiales" (nada de la última novedad que haya aparecido... empiezo a hacer la lista de la compra el 24 de abril del año anterior), acabo siempre encontrando lo que busco en Laie. Este año, "El libro de los libros" de Gallud Jardiel y "Los misterios del señor Burdick" de Van Allsburg los compré allá (y éste segundo realmente me sorprendió encontrarlo, porque lo editó FCE hace unos cuantos años).

laie dijo...

Muchas gracias por la visita a Pau Claris (que esperamos que no será la única) y por los comentarios. Por si acaso, mantendremos en orden la librería del CCCB ;-) Por cierto, gracias por el enlace a nuestro blog.

Damià.

martín gómez dijo...

Todo el mérito es de ustedes, así que felicitaciones. Ir a Laie es para mí todo un placer recién descubierto (lo haré con más frecuencia ahora que sé que queda tan cerca de mi casa).

martín gómez dijo...

Claro, Sfer, nada mejor que esas librerías en las que no sólo encuentras todo lo que buscas, sino que también terminas descubriendo cosas que no te esperabas.