miércoles, 7 de mayo de 2008

entrevista a eduardo moreno, editor de el olivo azul / “buscamos un equilibrio entre textos desconocidos de autores conocidos y de otros por conocer"

El Olivo Azul es una editorial que surge en Sevilla con el propósito de rescatar clásicos de la literatura europea que permanecían inéditos en castellano o que estaban descatalogados. Mientras se prepara para el lanzamiento de los primero títulos de su segunda colección, El Olivo Azul intenta consolidar un catálogo que se caracteriza por la variedad de tonos, de voces, de estilos y de géneros.


Martin Gómez: ¿Cuándo y por iniciativa de quién surge la idea de crear El Olivo Azul?


Eduardo Moreno: La editorial nace oficialmente en octubre de 2007, pero se viene gestando desde hace casi dos años. La idea de su creación surge de mí, que como lector formado en el extranjero me di cuenta de que muchos títulos importantes de la mejor literatura europea permanecían inéditos en castellano o bien estaban descatalogados. A partir de esta intuición entré en contacto con mis socios y acordamos crear la editorial.


En cuanto al nombre, no nace de un concepto o de una reflexión sino de una simple imagen: queríamos que el sello de la editorial fuese un olivo —el nuestro es un proyecto que, aunque abierto al mundo, nace en el sur—, pero un olivo peculiar y quizás algo surrealista: un olivo azul. Después nos pusimos a buscar nombres para la editorial pero los que se nos ocurrían eran todos más bien pretenciosos y lamentables, así que nos quedamos con El Olivo Azul —que de tanto repetirlo nos empezó a sonar bien—.


Parece que ha gustado y además nos viene bien para darnos una justificación literaria: Novalis, en su novela Enrique de Ofterdingen, habla de la flor azul, una flor incierta y remota que se le aparece al poeta-mago en sueños y de la que va surgiendo el rostro de la amada. Esperamos que de nuestros olivos azules surjan también el rostro de la amada y algunas otras cosas buenas.


M.G.: ¿Cuáles son las motivaciones que condujeron a la creación de la editorial?


E.M.: No teníamos intención alguna de hacer lo que ya está hecho. Es por eso que decidimos editar grandes obras de la literatura europea casi siempre desconocidas para el lector español. Nos motivaba que en nuestro catálogo hubiese variedad de tonos, de voces, de estilos y hasta de géneros pero también que todas las obras tuviesen algo en común: ser buena literatura, lo que para nosotros significa que desvelan, desentrañan y analizan conflictos y misterios de la existencia humana con una honestidad y profundidad incuestionables y sin concesiones a criterios ajenos al buen hacer literario. Obras que cumpliesen con un lema que Kafka aplicaba a su propia obra y que nosotros hemos hecho nuestro: que sean un punzón que sirva para quebrar la capa de hielo que cubre el corazón de los hombres.


M.G.: ¿Cómo se definió el perfil de las distintas colecciones de El Olivo Azul?


E.M.: Nuestra primera colección, “Narrativas del Olivo Azul”, es nuestro buque insignia y seña de identidad. Quisimos que en ella tuvieran cabida los libros que se destacan por la calidad de sus historias y por la manera, más sabia que novedosa, en que éstas están contadas. Pretendíamos dar especial atención a las formas breves y condensadas —novela corta y relatos— porque entendemos que éstas suponen lo más sobresaliente de la literatura moderna, pero sin que eso supusiera la exclusión de novelas y formas más extensas. De hecho, esta colección no se ciñe a un solo género sino que recoge el espíritu moderno —ese manantial subterráneo que corre bajo los siglos, que pretende suprimir la distancia entre los géneros literarios y que sospecha que más que una realidad objetiva hay relatos que crean y recrean múltiples mundos, aunque pocos de ellos merezcan ser contados—.


El próximo otoño queremos lanzar una nueva colección. Se llama “Errantes” y se centra en la idea del viaje en todas sus facetas: viajes reales, interiores y de ideas. Constará de libros de ensayo, aforismos, viajes, diarios, memorias y autobiografías, muchos de ellos obra de grandes narradores y poetas. Cada uno será, a su manera, una guía de perplejos.


M.G.: ¿Bajo cuáles criterios editoriales se eligen los libros que publica El Olivo Azul?


E.M.: Para nosotros hay un criterio básico e indiscutible: la excelencia literaria de la obra. Es decir, que la obra nos haya asombrado, tocado, dolido y deleitado. Que haya hecho cambiar nuestra forma de ver las cosas y, a ser posible, a nosotros mismos.


A partir de este criterio básico, queremos llegar en nuestro catálogo a un cierto y difícil equilibrio entre textos desconocidos de autores conocidos y textos de autores por conocer. De la misma manera aspiramos a conseguir un equilibrio sutil entre la calidad de nuestras propuestas y la sostenibilidad empresarial. Así, por ejemplo, algunos de estos textos son obra de autores muy conocidos —Schwob, Conrad, Apollinaire o Schnitzler— y de otros apenas conocidos en España —Shmeliov, Hildesheimer o Almada— pero que merecen serlo porque sus obras tienen la misma calidad que las de los anteriores.



M.G.: ¿Cree usted que El Olivo Azul está llenando un hueco que han dejado en el mercado tanto los grandes grupos como las editoriales independientes que ya están posicionadas?


E.M.: No hemos creado la editorial para llenar ningún hueco. Una editorial como la nuestra es una empresa peculiar que no se crea con base en estudios de mercado y cálculos realistas sino por el placer que nos proporciona la tarea. En este sentido, nos identificamos con algo que dijo nuestro admirado Jacobo Siruela: una editorial independiente es aristocrática, no debe buscar plegarse a una demanda previa sino afirmar una oferta propia. Esto no debe entenderse como soberbia porque en realidad también es práctico: quizás sea la única manera de hacerse un hueco en un sector tan difícil.


M.G.: ¿En qué consiste la estrategia tanto editorial como comercial de El Olivo Azul para alcanzar y conservar una posición propia en el mercado?


E.M.: Tanto por la calidad del catálogo como por el cuidado que ponemos en editar libros bellos y de agradable lectura, aspiramos a convertirnos con el tiempo en un referente para los amantes de la literatura. Éste es un aspecto muy importante para nosotros. Apostamos por la calidad y singularidad de nuestras propuestas en los contenidos pero también en las formas: cuidamos escrupulosamente las ilustraciones y el diseño de cada libro —de momento recurrimos a fondos de fotografías antiguas para las portadas—, utilizamos un papel ahuesado de extremada calidad y resistente, imprimimos en una máquina de última generación que asegura una impresión muy por encima de la media del mercado aunque suponga una merma en nuestro margen de beneficio y, por último, extremamos la atención a un proceso muchas veces desatendido que permite garantizar la durabilidad del libro como es la encuadernación —que incluye guarda—.


M.G.: ¿Qué distingue a El Olivo Azul de otras editoriales independientes españolas?


E.M.: En los últimos años han surgido en España varios proyectos editoriales muy interesantes —Libros del Asteroide, Periférica, Nórdica, Ediciones del viento y otros—. Aparte de algunos detalles —diseño de cubiertas, tipografía, trabajar desde el sur y apostar por las letras europeas—, más que diferencias con ellos encontramos coincidencias: todos buscamos una edición nueva y singular al margen de la ley de los grandes números y un tipo de lector exigente. Es decir, creo que más que competir sumamos. No buscamos ni llenar huecos ni diferenciarnos a toda costa: esto es algo que ocurre por sí solo con cada libro.


M.G.: ¿Cuál sería el balance de la experiencia de la editorial hasta ahora?


E.M.: Está siendo una experiencia increíble. A pesar de ciertos disgustos —insidiosas erratas, portes que se pierden y tintas que se mezclan— no dejamos de llevarnos alegrías: los libros —y el proyecto en su conjunto— están teniendo muy buena acogida en prensa y blogs, se están vendiendo aceptablemente bien y nosotros no dejamos de conocer gente interesante ni de aprender cosas cada día.


M.G.: ¿Podría adelantarnos algo con respecto a los libros que está preparando en este momento El Olivo Azul?






E.M.: Con mucho gusto. Estamos preparando la edición de la novela Nombre de guerra, del artista portugués de vanguardia José de Almada Negreiros —que saldrá en junio—. También estamos corrigiendo los manuscritos de los libros que editaremos el próximo otoño: Abadía Pesadilla, una sátira sobre el romanticismo del poeta romántico Thomas Love Peacock; El alegato de un loco, novela autobiográfica de August Strindberg sobre la destrucción de un matrimonio; Al final del mar, una colección de cuentos de Gabriel Soler —que es nuestra primera apuesta por un escritor joven—; Tratado elemental de demonología, colección de prosas narrativas de Chesterton. Además, preparamos el lanzamiento de nuestra segunda colección, “Errantes”, con dos títulos: por un lado, El paseante de las dos orillas, crónicas y paseos por el París vanguardista escritos por Apollinaire; y, por el otro lado, Las Noches Revolucionarias, crónica alucinante de la Revolución Francesa contada por el escritor Rétif de la Bretonne que participó en la misma.

6 comentarios:

Enrique Redel dijo...

Excelente entrevista, sí señor. Y enhorabuena a los Olivos Azules. Tengo toda la colección, y rezo por que aparezcan libros nuevos cada semana.
Muy recomendable. Y los libros hermosísimos.
Enrique Redel
(lector voraz)

martín gómez dijo...

De acuerdo, Enrique. Tengo la impresión de que el catálogo de El Olivo Azul cada vez se pone más interesante.

Una vez más gracias por pasarte por aquí.
Un abrazo.
Martín.

Anónimo dijo...

Como siempre, fantástica la entrevista. La descubrí con "El Sol de los muertos" y estoy atenta desde entonces.
Y enhorabuena por lo de Quimera.
Saludos
Sara

martín gómez dijo...

Sara, muchas gracias por tu comentario. Me alegra que te haya gustado la entrevista. Espero que las anteriores y las que vendrán también te gusten.

Un saludo y seguimos en contacto.
Martín.

Anónimo dijo...

¡Me encanta venderos los libros de Impedimenta y del olivo!

Os deseo un largo y fructífero catálogo.


Un vendedor catalán de UDL LIBROS

martín gómez dijo...

Hombre, pues muchas gracias a ti por hacernos llegar tan fácilmente los libros de estos y algunos otros sellos.
Martín.