miércoles, 9 de julio de 2008

¿por qué los británicos compran penguin classics?


Esta mañana encontré en el blog de Penguin UK una interesante reflexión de Fiona Buckland, la directora de ventas del grupo, con respecto a las razones por las que los libros de Penguin Classics se venden tan bien y por las que a la hora de comprar un clásico muchos lectores tienden a escoger la edición de esta colección en lugar de las muchas otras que hay en las librerías. Buckland explica el fenómeno a partir de dos argumentos de Dan Ariely:


1. El contexto es clave


(a) Déle a la gente muchas opciones y la conversión de echar un vistazo a comprar se reduce (¿cuántas ediciones de Orgullo y prejuicio necesitamos en las estanterías?)

(b) Para la gente es difícil definir el valor de algo en estado de aislamiento (…)


2. Creación de hábitos


Una vez empezamos a comprar algo, (digamos, café de Starbucks, o clásicos de Penguin), se vuelve mucho más fácil hacerlo una y otra vez. Se convierte en un hábito’.



Añade Buckland que ‘para mí la cuestión incluye pensar cómo traer nuevos lectores hacia Penguin Classics, así como recordarle a la gente no sólo cuánto placer ha experimentado leyéndolos sino también que más personas compran y leen Penguin Classics más que cualquier otra marca apelando de esta manera a la mentalidad de manada. Y aquí viene la parte confesional: me encanta vender Penguin Classics porque estos libros me encantan. Nunca he tenido una experiencia pobre tras escoger leer uno (quisiera poder decir lo mismo con respecto a cada libro que cojo). Si estuviera vendiendo cigarrillos, armas o discos de Céline Dion, podría sentir un conflicto moral mayor’.


Aunque es cierto que las palabras de Buckland parecen un autoelogio muy mal disimulado —cosa que no sorprende en una directora de ventas—, la reflexión que plantea sigue pareciéndome interesante y creo que todo editor debería preguntarse con frecuencia cuál es su posicionamiento en el mercado e identificar las razones que lo explican.

6 comentarios:

Enrique Redel dijo...

Enormemente interesante tu artículo de hoy. Puede ser aplicable a muchas otras cosas, a muchos otros sellos.
Interesante, sí señor.
Ah, por cierto, bienvenido de nuevo al mundo de los vivos. ¡Baja a la piscina, o ve a la playa!
Enrique

martín gómez dijo...

Justamente eso fue lo que me llamó la atención del post de la chica de Penguin.

Te confieso que la semana pasada casi la palmo y que ahora mismo estoy en pie porque el calor y la humedad han dado tregua.

Como siempre, es un placer que te manifiestes al pasar por acá.

Seguimos, Enrique.
Un abrazo.
Martín.

Susana dijo...

amo penguin classics. Son buenos, bonitos, baratos, livianos y caben en la cartera. Además, las ediciones son cuidadosas (jajaja, com si no fuera importante).

martín gómez dijo...

De acuerdo con todo lo que dices, Lalu, aunque (como dice una amiga argentina) 'convengamos' que eso de las ediciones cuidadosas no puede ser un simple "además".

Gracias por pasarte por acá y por tu comentario.

Seguimos...
Martín.

sfer dijo...

Cuando estudiaba, la razón para comprar un penguin classic en vez de un oxford world classic era, básicamente, el precio. Tampoco me parecían ediciones especialmente cuidadas, sobre todo en la colección "Penguin Popular Classics": el papel era para tirarse de los pelos... Son los que peor envejecen y los que acababan con el lomo más destrozado. Tampoco llevaban ningún "extra" (ni introducción, ni notas...). Eso sí, la pela era la pela...

martín gómez dijo...

Sfer, creo que tocas un tema crítico: el precio.

Aunque claramente estamos hablando de libros de combate, Penguin Classics es una colección con un buen fondo y ediciones dignas cuyos títulos tienen una buena relación entre el coste y la calidad de los contenidos. Y eso es justamente lo que uno necesita en sus épocas de estudiante y de mileurista...

A ver si algún día podemos comprar las ediciones comentadas de los clásicos que hacen las editoriales de Oxford o Cambridge.