miércoles, 6 de agosto de 2008

mis dealers

En cuestión de lecturas yo tengo mis dealers: personas que me suministran referencias de autores y obras que vale la pena leer y que mediante sus recomendaciones me van orientando como lector.


Se trata de lectores voraces, inquietos y curiosos en cuyo criterio confío bien sea porque sus acertados consejos han puesto en evidencia que éste está en sintonía con mi gusto o bien porque me han recomendado autores y obras que en su momento me han abierto nuevas inquietudes.



Aquí les presento a mis dealers de cabecera:


- Freddy: en materia de narrativa y poesía tanto modernas como contemporáneas parece haberlo leído casi todo —y no suelen faltarle referencias confiables con respecto a lo que no ha leído—.


- Roberto: ha cultivado no sólo una patológica gabofilia gracias a la cual descubrí una parte de la literatura del sur de los Estados Unidos, sino también una pasión por las formas clásicas y por la poesía de vanguardias de finales del siglo XIX y de principios del XX.


- Javier Moreno: todo un conocedor de la literatura estadounidense contemporánea y de sus entresijos más recónditos.


- El poeta Camilo Hoyos: mi referente # 1 en vanguardias artísticas europeas de principios del siglo XX.


- Camilo Jiménez: el blog del editor de la revista El malpensanteel ojo en la paja— es una excelente guía de lecturas de clásicos modernos y contemporáneos que saca a la luz autores olvidados y curiosidades varias.


- Subal Quinina: ha sido mi iniciador en la literatura catalana, bolañero hasta el tuétano, apasionado de la narrativa latinoamericana y divulgador de alguna figura eslava —que pronto publicará en su editorial—.

4 comentarios:

blumm dijo...

Curioso.
Mi principal dealer es Enrique Vila-Matas. Estoy recuperando a todo autor que ha dicho que ha leído. Y como le gusta ser metaliterario qué fácil me lo pone. Además, le debo también el descubrimiento de autores como Maxwell, editor y escritor.
Tú, para qué mentir, también has entrado en la nómina en este último mes como dealer. Caerá alguno de los que recomiendas.
Jorge, mi socio editor, también es un buen dealer.
Escribiré a la vuelta de vacaciones un post con mis dealers, todos nombrados.
No olvidaré a Antonio, un empleado de la librería donde compro los libros. Él por ejemplo, me descubrió a Schwob, autor-chispa que hizo a Borges despegar...

¡Qué mundo!

martín gómez dijo...

Claro, los autores metaliterarios son excelentes dealers. Y si te gusta la metaliteratura, todavía más.

Siempre es bueno tener un dealer librero porque además de tener el conocimiento, puede facilitarte enormemente el acceso a las lecturas que te recomienda.

Espero no decepcionarte con mis recomendaciones y que al menos alguna de ellas te resulte provechosa.

Un abrazo.
Martín.

Roberto Angulo dijo...

mira cabeza e ñame, esa es una buena síntesis de mis lecturas no recomedadas por ti, es decir, de las que yo te recomendé a ti...

bueno, de la gabofilia me queda la sensación de haber leído una amplia y magistral obra completa antes de los 18 para decantarla once años después con relecturas que, por qué negarlo, han ido menguando con el tiempo, de hecho, lo que permanece en mi mesa de noche son los textos costeños, lo primero de GGM...al final la obra de GGM terminó por empotrarse en mi pasado como un telón de fondo. En cambio, ya debes saber Mártin que desde que te fuiste leo con el mismo fervor patogabofílico a Vallejo y a Gomez Dávila...de repente te largaste y sin quererlo, ahora que lo pienso, mi biblioteca ha cambiado...una pasada de esas que te gusta documentar, sobre mis lecturas recientes y frecuentes: No es país para viejos (Cormac McCarthy), Ensayo sobre el pensamiento reaccionario (Cioran), Notas (Gomez Dávila), Escolios a un texto implícito (Gómez Dávila), Obra completa literaria y no literaria (Fernando Vallejo, para mi de los más grandes en español), Todas las novelas hasta ahora (Houellebecq), Ensayos Filosóficos (Adam Smith), El hombre está solo (Julian Huxley, el biólogo, que por cierto me cautiva más que Aldous), Prosa y teatro completos (Woody Allen), Memorias de Balthus (de Balthus por supuesto), La Universidad Desconocida (Bolaño, que lo compré por curiosidad y me sorprendió gratamente, sin decir que es magistral tiene momentos líricos, sobretodo en los poemas que son en prosa), Entrevista a Bacon, La casa del Hombre y A Propósito del Urbanismo (Le corbusier, excelentes), La palabra pintada y Quién le teme a la Bauhaus Feroz (de Tom Wolfe), Delirio de Nueva York (Rem Koolhas)- Memorias de un Burgués, El Ultimo Encuentro, La Herencia de Eszter, Tierra Tierra! (de Sandor Marai y por culpa del gran dealer Freddy, producto de nuestra última conversación ya hace un par de años), Amor y Pedagogía (Unamuno) y esta joya Mártin, párele bolas: El Sueño de los Héroes de Bioy...

Hablando de vanguardias del siglo XX, acabo de llegar de Lima y me traje unas joyas que ni te imaginas: una edición facsimilar de todos los números de "Letras Peruanas" (donde escribía Arguedas, Moro, Mariátegui) y otra de la revista "Moradas" dirigida por Adolfo Westphalem con ensayos muy al estilo Mito sobre pintura, poesía, teatro, arquitectura contemporánea a mediados del siglo pasado, escriben ahí los surrealistas peruanos y los antisurrealistas, está el panfleto contra Huidobro y cosas por el estilo...Mucha poesía en "Moradas". Además compré completa de éste útimo y una antología de poesía peruana cotemporánea a dos tomos. Me compré "Etiqueta Negra"...me gustó mucho, lástima que la sección "cuento inédito" fuera de Juan Gabriel Vásquez, a quien no he podido leer, quizá por prejuicio...a menos que tu me lo recomiendes...su literatura, al igual que las de sus contemporáneos colombianos, para mi carecen de vitalidad...puro neutralismo parricida del malo...

martín gómez dijo...

Tremenda diversificación de intereses, Angulo. Me parece envidiable porque aunque de un par de años hacia acá he vuelto a leer ensayo, a mi me cuesta trabajo meterme en la lectura de cosas que no sean ficción literaria. Creo que al fin y al cabo sigo siendo en esencia un lector de narrativa.

Me llama la atención que tres de los autores de los que más me ha hablado desde que me fui sean iconoclastas y provocadores: Vallejo, Gómez Dávila y Houellebecq.

Lo de las compras limeñas tiene buena pinta. Desde hace unos años Lima tiene una movida bastante interesante en el ámbito literario. Cada vez me convenzo más de que hay que mirar hacia Lima.

A mí Juan Gabriel Vásquez me parece un escritor malísimo aunque en el ojo en la paja Camilo Jiménez hizo una reseña positiva de Los amantes de todos los santos, un libro de cuentos que ya tiene sus años.

Y bueno, me alegra que haya conseguido tomar una distancia frente a García Márquez...

Ya comentaremos lecturas en septiembre.